El amigo.

No hay palabras que describan la gratitud que me embarga al referirme a un gran amigo que siempre ha estado presente en todas mis hazañas. Sin duda, un compañero fiel. 

Un aventurero ardiente que por las noches suele ir en busca de nuevas pretendientes, siempre se encuentra activo pues nunca descansa hasta ver sus objetivos cumplidos, un confidente de todos mis logros nocturnos, con el cual no recuerdo ni un sólo fracaso de su lado dado que siempre ha estado presto a ayudar. En definitiva, un digno merecedor de la belleza femenina que con sutiles palabras acertadas logra convencer.

Cuán agradecido me siento contigo, mi amigo. Has defendido mis ideas con tanto fervor que las tomas cómo tuyas y las has ejecutado de una forma tan sublime que no me queda más remedio que otorgar el crédito que te has sabido ganar.  Por ti he hecho lo incorrecto y lo necesario para lograr nuestros cometidos en esas noches soberbias donde con mérito hemos apasionado a numerosas féminas. 

Hoy, pese a la corta edad que tengo, viene a mi mente un carrusel de recuerdos donde se encuentran todos los grandes éxitos que hemos compartido. 

Para mí eres un ganador, mi compañero predilecto cuándo de encantar a las mujeres se trata, coautor de todos los poemas que he escrito para endulzar el oído femenino. 

Has triunfado tantas noches que no hay pared que enmarque todos tus logros, pero si me has defraudado, confundido por las copas de vino, es normal, pocas veces has fallado y tus errores nunca harán ver pequeña tu grandeza.

Picaflor empedernido desde muy temprana edad, admirador del arte que representan las mujeres, cómplice de los pocos fracasos que he tenido seduciendo a mis amantes porque te has llevado el dolor de la derrota impregnado en tu piel, pero cuándo gano sabes disfrutar el momento, saboreando lo más dulce del placer.

Mi amigo, has vivido tantas aventuras amorosas que ya ni lo recuerdo, pero ahora que lo pienso siempre en las fiestas te has llevado placenteros recuerdos de la mano de hermosas mujeres. Indudablemente a tu lado todas las noches son de bohemia y aún más cuando nos encontramos rodeados de tantas bellezas.
Por esto tanto te amo y tanto quiero, como sin malinterpretar has de entender. 
Si me has quedado mal ya lo he olvidado y sin dudar te habré perdonado. 

Eres alguien que siempre ha sido galardonado con dulces besos, para ti siempre serán mis mejores augurios  y con especial atención te deseo que nunca te falte lo que tanto adoras de una mujer.

Mi estimado amigo, no imagino cómo sería mi vida sin tu valiosa compañía. Es por esto que en el día de hoy te invito a brindar por esta admirable hermandad que hermosas mujeres ha sabido cautivar.