Lleno de fracasos.

He buscado el amor tantas veces que ya ni me acuerdo, he buscado el amor como aguja en un pajar, pero mi búsqueda no ha dado los resultados esperados, ni siquiera he tenido indicios que justifiquen mi afán. 

Me he cansado de esperar un poco de cariño proveniente de cada mujer que llega a mi vida, pero solo recibo llantos, tristezas y lagrimas que me inundan de melancolía.

Tal parece que el amor no es para mí, tal parece que la razón de ser de mis poemas no juega a mi favor. 

Perdí mi tiempo escuchando canciones románticas, en vano fueron todas aquellas noches en las que me desvelaba soñando despierto con un amor verdadero, de nada sirvieron esos versos melodiosos que compuse con cariño y hasta resultaron ser infructuosos mis deseos de tener un amor sin fecha de caducidad.

Y Cupido parece burlarse de mis fracasos, se ríe sin consideración de cada una de mis derrotas en el amor, sus carcajadas me despiertan por la noche y me impiden descansar con tranquilidad.

Quizá lo hace porque no comprende mi dolor, no sabe cuanto sufro por no tener amor, no tiene ni idea de las veces que llorado sin que alguien se compadezca de mi llanto, no se imagina lo que me duele andar en este mundo mendigando migajas de cariño o puede que sea él quien ha causado tanto mal a mi pobre corazón.

Tal vez se burla de mi desdicha, de que la mala suerte adora perseguirme, de que las rosas se marchitan cuando las tengo en mis manos, de que los chocolates se derriten cuando voy a obsequiarlos a la mujer que amo.

He buscado el amor tantas veces que ya ni me acuerdo de todas las veces que han fallado mis esfuerzos, me he llenado de fracasos y de intentos fallidos en mi tarea de encontrarlo pero mi perseverancia se ha agotado y ya me he resignado a vivir sin amor, a estar solo y a ahogarme en mi dolor.