Yo siempre estaré ahí, a tu lado.

El día llega a su fin mientras yo te espero mirando la ventana, deseando ver como te acercas en tu llamativo auto.

Físicamente estoy solo desde la mañana cuando te fuiste a trabajar, pero en el plano amoroso nunca estoy solo debido a que en ocasiones te molestas y me dices que te irás para no regresar, sin embargo, nunca dices adiós ya que te quedas por los alrededores, cuidándome desde la distancia.

Cada día detallo mi ser, observándome frente al espejo, analizando como ha cambiado mi vida desde que llegaste, me sorprende mucho como me he aferrado a ti en tan poco tiempo. Solo con una sonrisa de tu parte y como si un mago moviera su varita mi día será excelente.

Tan enamorado estoy que nunca quisiera irme lejos de ti. Jamás vas a caminar sola, hasta mi final iré a tu lado sosteniendo tu mano. No importa que tan lejos estemos, siempre correré para alcanzarte. No te afanes por irte o por quedarte en algún lugar para esperarme, eres mi sueño y siempre iré a por ti. Eres todo lo que mis ojos quieren observar y a donde mi cuerpo involuntariamente querrá ir.

Quizás a los ojos de las demás personas esta sea una noche más que duermo contigo pero para mi es otra noche en la que estoy en el paraíso, en la que me encuentro en un lugar mágico donde no necesito nada más, solo a la mujer con la que deseo pasar el resto de mis días. 

Solo necesito tu mano para sentirme seguro, para sentir que me acompaña en el camino de la vida la persona que quise tener desde niño.

No necesito un mapa para ir al lugar donde soy feliz. No necesito buscar la felicidad en libros de romances históricos, ahora tengo mi felicidad justo frente a mi, observándome amorosamente con unos hermoso ojos cafés mientras realizo este escrito.

Ya no tienes que correr cuando la oscuridad quiera entrar a tu vida, yo estaré ahí para que mi corazón ilumine el sendero que te lleva hacia tus sueños. 

Yo siempre estaré ahí, a tu lado.