Mensajes.

Hola. 
No pude escribirte antes porque mi teléfono se había descargado y me encontraba en un lugar que esta muy lejos de cualquier enchufe.
Durante mi tiempo en aquel lugar pensé mucho en todas las veces que hablamos, las pocas sonrisas que me he llevado y el interés que siento poco a poco ir perdiendo. 

Hace tiempo que mi teléfono no notifica un mensaje tuyo, que no despierto con unos buenos días de tu parte y han pasado varias semanas en que tus respuestas son enviadas varias horas después de las mías. Es como si forzara algo que no tiene futuro porque te veo en linea pero no hablando conmigo. Quizá tienes otra persona en tu vida, tal vez alguien más ya robo tu corazón y yo soy un simple estorbo en tu camino feliz.
No es que quiera ser egoísta, solo me gustaría ser el único a quien le respondieras al segundo, quien te sacara una sonrisa con tan solo enviarte un emoji, la persona con la que te duermes tarde mientras tienes conversaciones que te enamoran, pero para mi desgracia no soy ni siquiera una cuarta parte de lo que estaría encantado por ser.

¿Sabes? Este no era el cielo que esperaba tener contigo. Quizás este siendo muy impaciente, pero cuando se desea un objetivo el simple hecho de querer hace que las posibilidades de realizarlo sean mucho mayores. Al parecer no me quieres mucho. 
Tus actitudes me demuestran que no importo, aunque con tus palabras intentes cerrar mis ojos, negándome ver una realidad de la que soy consciente que ciertamente este no era el viaje que planeaba para los dos.

No es necesario que un conocido me diga que no soy correspondido, es algo muy obvio a ojos de todos y aún más para mi triste corazón. 
No eres la primera con la que siento esto, no te preocupes. Quizá se deba a que las personas le huyen a los buenos sentimientos, a los compromisos y todo lo que conlleve una buena relación de pareja.
Tampoco te sientas mal, a lo mejor no entiendo como funciona el amor por estos días. Me ilusioné muy rápido y soñé con tener un amor puro sin tener por lo menos los cimientos para construirlo.

No te seguiré molestando con mis mensajes, ya me acostumbré a que todos me escriban, excepto tú. 

Este será el ultimo mensaje que recibirás de mi parte. 
No tengo ningún rencor contra ti, hago esto para liberarme de esta cadena de infelicidad que traen las seis horas que tardas en contestar.

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